sábado, 31 de octubre de 2009

Las tradiciones que no puedo dejar !!!!!

Hace muchos años que no me ocupaba en poner mi altar de muertos para agazajarlos ahora que vienen a visitarnos del mas allá el 1 y 2 de noviembre. Este año me sentí desocupada y con ganas de hacer algo interesante, creo que me lucí, ya tengo mi altar listo y apenas es 31 de octubre (día de brujas para otros países, para este también pero no me late mucho). Desde que tengo memoria mi mamá siempre pone un altar, una veladora para cada difunto, afortunadamente desde hace 5 años no ha aumentado esta lista, solo llevamos 12 veladoras y 1 para las almas del purgatorio como nos enseñó mi abuela, les deja comida como dice la tradición: la que mas les gustaba en vida y obvio también bebidas.

En mi altar no pueden faltar los dulces para dos de mis tíos que fallecieron a pocos meses de nacidos (hermanos de mi mamá), café "negro" muy dulce, coca-cola de botella de cristal y tamales para mi tía María Elena (también hermana de mi mamá), mole y arroz para una de sus comadres y para mi abuela Piedad (paterna), café soluble para otra de mis tías Gabina (hermana de mi papá, casi su segunda mamá), una cerveza Victoria para mi abuelo Sabas (paterno) y un tequila para mi tío Germán (hermano de mi papá), un vaso de agua para las animas del purgatorio que no tienen quien les ponga nada en estos días que regresan, dulce de calabaza y camote cristalizado, frutas como caña, guayaba, mandarinas, manzanas y platanos; y un mini anafre con incienso para limpiar las malas vibras y preparar el viaje de nuestros visitantes como también lo dice la tradición.

Este año tuve ganas de encargame yo misma de este ritual, en diciembre se cumplen 5 años de la pérdida de mi Gordita, mi tía María Elena (hermana de mi má) fue la mujer mas noble y generosa que en mis 25 años he podido conocer y sé que jamás podre encontrar a otra mujer igual, con un corazón tan grande como el universo. Ella era casi mi madre, siempre risueña y de buen humor, sensible sin limites como lo soy yo, con las lágrimas al borde de los ojos, siempre preocupada por los problemas cercanos a ella y a los suyos que tanto amaba; siempre dispuesta a ayudar a todo el que podía y hasta al que no podía también, propios y extraños; madre, hijos, esposo, hermanos, sobrinos, amigos del amigo, etc. Fue y aún es mucho para nosotros, supongo que a sus hijos (mis primos) y a mi tío les dolió su partida y les sigue doliendo como a nadie, me incluyo como una de las personas a las que todavía les afecta su ausencia física, solo las personas que han pasado por una desgracia como esta saben que esa ausencia no se llena con nada, ni con viajes, ni con otras personas, ni con casas, autos o pertenencias, ni los recuerdos ayudan porque en mi caso lo empeoran, cada que la recuerdo siento tanto que no este aquí; pero como bien lo dijimos en su momento hace 5 años, fue mejor así, ya no sufre, es feliz y sé que vendrá a visitarme estos 2 días aunque también sé que nunca se ha ido del todo, sigue de cerca nuestros pasos y todavía nos tiende la mano desde donde está.

Les dejo unas fotos de la preparación de mi altar de muertos.



PD. Con muchisimo cariño y respeto para Marienena, TE AMO Gordita!!!

2 comentarios:

Trovator dijo...

Nada mejor que retomar antiguas tradiciones, que incluso se creían muertas, y tomar a la cultura del cuello y sacarla a relucir una vez más.

Un abrazo!

Luz dijo...

Que bonita tradición. Recordar a los que quisiste.


Saludos desde mi camino.